Durante el virreinato, el Perú fortaleció mucho su comercio. El problema fue que este era controlado por los españoles. Estos no les daban mucha libertad y tenían sus propios intereses. No aprobaban el comercio entre colonias. El Perú solo podía exportar cosas a España o a lugares aliados. Esto llevó a que se creara el tráfico ilegal de productos.
Habían tres clases de comerciantes:
- Armadores: compraban las mercaderías adquiridas en la feria de Portobelo y las traían al Callao.
- Factores: eran los intermediarios pues le compraban productos a los anteriores y se los vendían a los tenderos.
- Tenderos: compraban los productos de los factores y los vendían en sus propios establecimientos.
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